Durante mucho tiempo Alexander Graham Bell fue considerado el inventor del teléfono pero solamente fue el primero en patentarlo en 1876.
En junio de 2002 el Congreso de EEUU aprobó una resolución, por la que se reconocía que el inventor del teléfono había sido Antonio Meucci, que lo llamó teléfono.
En 1857 Antonio Meucci construyó un teléfono para conectar la oficina con su dormitorio, ubicado en el segundo piso, debido al reumatismo de su esposa. Sin embargo carecía del dinero suficiente para patentar su invento, por lo que lo presentó a la empresa Western Unión, que no le prestó atención, pero que, tampoco le devolvió el invento.
Al parecer, y esto no está probado, este prototipo de teléfono cayó en manos del inventor estadounidense de origen escocés Alexander Graham Bell, que lo presentó como propio.
En 1876 Bell patentó unas horas antes que su compatriota Elisha Gray el primer teléfono capaz de transmitir y recibir voz humana.
Había rumores de que Bell tenía un confidente en la oficina de patentes, el cual le avisó con antelación de que se iban a comparar las dos patentes (la suya y la de Gray) para desechar la opción peor y más costosa.
Se dice que Bell tuvo acceso a comparar la patente de Gray con la suya y que añadió una nota escrita a mano en la que proponía un diseño alternativo al suyo…..idéntico al de Gray.
Bell en 1876 registró entonces una patente que realmente no era invención suya. Posteriormente se supo que había un acuerdo por el cual Bell pagaría a la Western Unión un 20% de los beneficios derivados de la comercialización de su invento durante 17 años seguidos.
Tampoco se debe dejar de lado a Thomas Edison, que introdujo grandes mejoras entre las que se encuentra el micrófono de gránulos de carbón.